viernes, 27 de junio de 2014

EL MOLINO BORILES. UN MOLINO ÚNICO.

El molino en una vista nocturna. Foto de Christian Andújar.
Si existe en la Nava un edificio o construcción singular, este es, sin duda el Molino Boriles. Si bien no se encuentra situado en el casco urbano, siempre se ha considerado perteneciente a la Nava de Arriba, de hecho, en algunos mapas se encuentra señalado como Molino de la Nava de Arriba.
Decimos que se trata de un molino singular, y sin duda así es por varios motivos.
En primer lugar en lo referente a su antigüedad, muy probablemente se trate de una de las construcciones más antiguas que todavía quedan en la Nava, si bien se encuentra en ruinas.
En algunos textos se le otorga una antigüedad de más de 300 años, aunque este es un dato que ofrece algunas dudas.
Existen distintos estudios sobre el origen y la difusión en la Península Ibérica del molino de viento. Estudios que defienden que ya fueron conocidos en la antigüedad clásica e inventados por los griegos hacia el siglo I o II de nuestra era, desde donde pasaron, primero a Roma y más tarde a todo su imperio. Hay otros que mantiene que fueron concebidos en oriente hacia el siglo X y traídos por los árabes. Y por último, hay quien afirma que los más antiguos fueron los de Holanda y Bélgica y que su primer diseño data del siglo XII, desde donde se expanden por el resto del continente europeo.

Interrogatorio del Catastro de Ensenada.
No obstante, según parece, los molinos de viento en España se remontan al siglo X, aunque parece que se comenzaron a implantar en La Mancha en  torno a 1575. Pero teniendo en cuanta todo lo anterior, en ningún texto de esas fechas se hace referencia a este molino situado en la Nava, como tampoco aparece reflejado en el Catastro de Ensenada según las respuestas dadas por los regidores de la Villa de Peñas de San Pedro el día 6 de Febrero de 1753. En esta comunicación tan sólo aparecen diversos molinos de agua en el Término de la Peñas de San Pedro, pero ningún molino de viento. Por lo que, o bien por aquel entonces el Molino Boriles, aunque ya existía no estaba operativo, o lo que parece más probable, todavía no se había construido.

Pero dejando de lado su antigüedad, lo que hace verdaderamente singular al Molino Boriles es su forma de construcción, que lo hace único en España, ya que no se corresponde con el modelo mediterráneo ni con el manchego.
La estructura esta realizada con una base de forma troncocónica de 1,30 metros de altura de cada capa superpuesta, el grosor del muro de 90 cm, y un perímetro exterior de 19, 30 metros. Continua elevándose como si se superpusiera otra capa troncocónica de menor perímetro que la anterior, observándose en el interior como se forma una repisa al acabar en ella un enlucido de bóveda. Termina la tercera capa de forma aboveda incompleta al estar situada en el techado el rotor, por lo que el techado debió ser de otro material..
La altura de los restos visibles es de 3,90 metros, observándose una ventana al saliente, que seguramente servía para sacar los sacos de la molienda y para tener luz del sol a primera hora de la mañana, y una puerta de entrada al mediodía.
Pero sin duda lo más llamativo de este molino situado a 950 metros de altitud es un machón cilíndrico de 1,20 metros de altura y 4,10 de perímetro, el cual soportaría el peso del piso donde se encontraban las piedras (solera y volandera) y el resto de la maquinaria.


El viento es la fuerza usada tradicionalmente en muchas zonas de La Mancha para la molienda del grano debido a la ausencia de cursos de agua permanentes que son los que posibilitan el molino hidráulico.
Estos ingenios requerían una gran destreza en su manejo por tratarse de un artefacto de precisión que necesita de conocimientos precisos, tanto sobre la maquinaria como sobre los vientos. Circunstancia ésta que obligaba a los molineros a tener un gran conocimiento de los vientos, al igual que los marineros, para aprovechar esta fuerza y también para evitar problemas con el mantenimiento de la maquinaria. El desastre extremo que podía producirse es que el molino "clavara la cabeza" o "hincara el pico", hecho que se produce cuando hay un cambio de viento repentino que hace que éste sople de espaldas a la orientación del molino. Cuando esto se producía significaba restituir íntegramente toda la maquinaria.

En Cuanto a la descripción de un molino de viento podemos señalar:
La torre, elemento inmueble principal del molino se construye en mampostería de piedra, cal o yeso, revocada en el exterior y el interior, y forma troncocónica, escalonada en algunos casos (como es el caso de el Molino Boriles).
 El molino tiene tres plantas: la superior donde se ubica la maquinaria, la planta baja donde se ubican la romana y harinal, y una entreplanta. La planta intermedia, de poca altura (1 metro aproximadamente), que sirve para ubicar partes de la maquinaria y como almacén de cacharros. La construcción posee dos puertas enfrentadas que permitían el acceso al molino cuando las velas en movimiento tapaban una de ellas. , obra realizada con tablas de madera, que es un elemento móvil que se gira buscando los vientos.
Coronando el molino está el chapitel, obra realizada con tablas de madera, que es un elemento móvil que se gira buscando los vientos.
El funcionamiento de la maquinaria se basaba en hacer girar una rueda vertical inclinada o de puntería que transmite la fuerza del viento que recogen las velas. Esta rueda se engrana con otra, horizontal o linterna, que transmite la fuerza a un eje donde se encuentran las dos piedras de moler (la de abajo fija, solera, y la de arriba móvil, volandera). La energía eólica era recogida mediante velas  que partían de un eje de madera de gran tamaño atadas con sogas en todo su borde a los palos. Todo este sistema se encaraba al viento moviendo todo el chapitel del molino mediante una gran viga, llamada guía que a su vez se sujetaba a unos puntos de piedra alrededor del molino para fijarlo.


Molino de los Genoveses. Almeria.
Como decimos, la construcción de este singular molino no se corresponde ni con el modelo mediterráneo ni con el manchego, aunque se aproxima, en algunos elementos, al modelo mediterráneo, y más concretamente a diversos molinos existentes en la zona de Murcia, Almería  (como el molino de los Genoveses) y Cádiz (como el molino del Conde o de Santa Ines, en Vejer de la Frontera), algo que hace más interesante si cabe la investigación sobre su origen. 
Molino del Conde o de Santa Ines. Vejer de la Frontera (Cádiz)


No obstante, efectivamente se trata de un molino único en España, fuera de toda norma en cuanto a su construcción y del que resulta difícil encontrar su origen.

Buscando información que pudiera arrojar algo de luz en relación al origen de este molino encontré un dato curioso –al menos a mí me lo parece-. Se trata del nombre o apellido “Boriles”.
En la Nava de Arriba existe ese mote o apodo (boriles), pero entiendo que es posterior a la construcción del molino, por lo que buscando datos sobre ese apellido para intentar descubrir el origen del posible constructor o antiguo propietario del molino, encontramos que se trata de un apellido de origen italiano.  Borile es un apellido típico veneciano que también está presente en Lombardía y Piamonte. Curiosamente, donde más personas apellidadas hay en el mundo es en Pádua, Italia, por lo que encontramos una curiosa conexión entre el Molino Boriles (“Borile”) y nuestro patrón, San Antonio de Pádua.  Quien sabe si este curioso molino fue construido hace varios siglos por un italiano apellidado Borile (de ahí  Molino Boriles), y quien sabe igualmente, si aquel primer molinero de la Nava tuvo algo que ver en la adopción de San Antonio de Padua como patrón de nuestra aldea.
Sea como sea, y dejando de lado estas conjeturas, estamos ante una construcción histórica y singular que merece la pena visitar, por el molino en sí y por el entorno.  Y por otro lado, por esa misma razón se debería proteger. Aunque se trata de una propiedad particular, no estaría de más que el Ayuntamiento hiciera lo que esté en su mano para proteger (ya no digo restaurar) este molino único. Mucho me temo, que de no ser así, dentro de muy poco tiempo sólo veamos un montón de piedras donde antes estuvo el Molino Boriles. Un molino único.




miércoles, 7 de mayo de 2014

Un poco de historia.



No resulta fácil determinar la fecha aproximada en que se realizaron los primeros asentamientos humanos en Nava de Arriba.
Las primeras referencias escritas que se han encontrado sobre la población datan de 1789, pero dichas referencias no son a la Nava de Arriba, sino a la Nava del Pilar, nombre originario de la población. Dichas referencias las encontramos en el “Nomenclator ó diccionario de las ciudades, villas, lugares, aldeas, granjas, cotos redondos, cortijos y despoblados de España, y sus islas adyacentes: con expresión de la provincia, partido, y termino á que pertenecen, y la clase de justicias que hay en ellas”, que salía de la Imprenta Real de Madrid en el citado año de 1789. Como se dice en la portada de este Nomenclator, toda la información que recogía estaba basada en las relaciones de los intendentes de la provincia del reino, pedidas “de orden de su magestad por el excelentísimo señor conde de Floridablanca, y su ministerio de estado, en 22 de marzo de 1785″.
Así, en dicha publicación encontramos los siguientes datos: Nava del Pilar. Granja de Señorío Secular. Provincia de La Mancha. Partido de Alcaráz. Término de Peñas de S. Pedro, existiendo además una Nava del Almed, y una Nava del Rincón, en el mismo Término. Como vemos, se trata de una Granja de Señorío Secular, teniendo en cuenta que dicha denominación (Granja) significaba aldea de poca importancia y escasa relevancia, aunque no en el sentido en que la entendemos hoy en día.

Recordemos, que un Señorío es  una institución propia de la Edad Media y la Edad Moderna en España. Se trata de una donación hereditaria de tierras y vasallos, incluida la jurisdicción, dada por monarcas a nobles y a clérigos como pago por servicios prestados o recompensa a méritos adquiridos, pero por su mera voluntad y que en el caso de la Nava del Pilar era de carácter secular, es decir, no religioso.
Suponemos, teniendo en cuenta los datos señalados, que dicho Señorío pertenecía a los Condes de las Navas de Amores.
No obstante, anterior a esas referencias a la Nava del Pilar en 1789, existe en el Archivo Histórico Provincial de Albacete, un Plano del año 1753 del Término de Peñas de San Pedro en el que ya aparece como aldea de la Peñas la Nava de Arriba (en este caso no la Nava del Pilar, por lo que parece que la aldea se conocía por los dos nombres).   
PLANO DEL TÉRMINO DE PEÑAS DE SAN PEDRO EN 1753.




Hace algunos años, en el Pregón de nuestras Fiestas en honor a San Antonio, fue invitado como Pregonero de las mismas D. Francisco Navarro Pretel, (D. Paco, párroco de Lietor), que fue durante años nuestro párroco y que hizo referencia a dichos Condes de las Navas de Amores, señalando que tuvieron su Solar en nuestra aldea. Lo cierto es que yo nunca había oído hablar de estos Condes, y mucho menos, que tuvieran algo que ver con nuestra Nava.
Lo referido por D. Paco despertó en mí la curiosidad por investigar sobre estos Condes, y efectivamente, parece que aquellas “Navas de Amores” se referían, quizás entre otras a nuestra actual Nava de Arriba y por aquél entonces Nava del Pilar.
El Condado de las Navas de Amores fue un título nobiliario otorgado por el Rey Felipe V, el 15 de Noviembre de 1740, para él y sus descendientes, a D. Pedro García-Amores y Angulo Espinosa y Thomas, que ostentaba previamente el Vizcondado de Villarejo (se supone que el Villarejo de Ayna o de Lietor).
Prueba de dicho otorgamiento es este fragmento del original de la Merced publicada en la Gaceta de Madrid núm. 46, de 15 de noviembre de 1740, páginas 367 a 368:

El primer Conde de las Navas de Amores, el citado D. Pedro García-Amores era natural de Elche de la Sierra, y  fue Alguacil (antiguo gobernador con potestades en lo civil y criminal) perpetuo de las Peñas de San Pedro, Término al que pertenecía la Nava del Pilar.
Hay que decir que la casa de Amores, ( privilegiada desde 1435 con el señorío y la alcaidía de la villa de Ayna por el rey don Juan II, como descendientes de los 25 caballeros conquistadores y pobladores de la villa) se convirtieron en una de las principales casas fuertes de la provincia elevada por Felipe V en 1740 al rango de nobleza titulada por concesión del señorío de las Cinco Villas de la Sierra de Alcaraz (Riópar, Villaverde, Bienservida, Cotillas y Villapalacios) y el condado de las Navas de Amores.
 
Como curiosidad, podemos decir que Don Nicolás de Amores Bueno, descendiente del Conde de las Navas de Amores, fue nombrado Gentilhombre por la reina Isabel II y que Cristobal Amores Baltanás, último  Conde de las Navas de Amores, fue Alcalde de Albacete en 1884.
Por todo lo dicho, y si en 1740 se otorga el título de Conde de las Navas de Amores, se supone que ya en aquel año existía alguna Nava, bien sea la Nava del Pilar, del Almed o del Rincón, y podemos suponer, ¿por qué no? que una de esas “Navas de Amores” era la Nava del Pilar, y más teniendo en cuenta que en el citado año de 1789, en el que como decíamos se tienen las primeras referencias a la Nava del Pilar, existía un Señorío Secular sobre la población.

Más todavía podemos suponer,  y parece probable, que sobre el año 1700 ya podría existir población en la Nava del Pilar, ya que, según algunos datos, el Molino Boriles tiene unos 300 años de antigüedad, y posiblemente si se construyó en esos años era porque ya había habitantes en la aldea.
Hecha esta mención a los Condes de las Navas de Amores, volvamos a las fechas en las que encontramos referencias a la Nava de Arriba, o todavía a la Nava del Pilar.

En los años 1827 y 1832 aparecen los mismos datos: Granja de Señorío Secular, en el mismo Término.
En 1833 se crea la Provincia de Albacete, y en 1821 se había creado el Municipio de Pozohondo, segregándose del de Peñas de San Pedro.
En 1834 ya aparecen la Nava de Arriba y Nava de Abajo (que ya aparecían en el Plano de Peñas de San Pedro de 1753) pero ambas pertenecen todavía al  Término de Peñas de San Pedro (según los datos del Diccionario Geográfico).
Por lo tanto parece ser que  en este año de 1834 es el momento  en el que la antigua Nava del Pilar pasa a denominarse definitivamente Nava de Arriba.
En 1835, en el mismo Diccionario Geográfico, se citan Nava del Pilar de Arriba y Nava del Pilar de Abajo, además de Nava del Rincón. Ya no aparece Nava del Almed. No sabemos si se trata de un error o ambas Navas del Pilar (de Arriba y de Abajo) se refieren a dos núcleos de población de la Nava de Arriba, ya que según algunos datos históricos, la Nava del Almed era el antiguo nombre de la Nava de Abajo, por lo no está claro que aquella Nava del Pilar de Abajo se refiriera a la actual Nava de Abajo.

Y es en el año 1842 cuando las dos Navas pasan a formar parte del Término de Pozohondo. Prueba de ello es el Oficio (comunicación) el cual transcribo, que recibe Juan Navarro, Alcalde o Pedáneo por aquel entonces de la Nava de Arriba, en el que se le pide que haga entender a los vecinos de la Nava que vayan a tomar parte en la elección del Ayuntamiento de la nueva Villa de Pozohondo. Ese Oficio dice lo siguiente:





Acabo de recibir un oficio en el que se me “prebiene”, “aga” entender a estos vecinos, “bayan” el Domingo 6 del corriente, los que quieran tomar parte en la elección de Ayuntamiento, en esa “nueba”Villa: En el día de mañana quedaran todos enterados de su cometido.
Nava de Arriba 4 de Febrero de 1842.












En dichas elecciones se nombró como Compromisario en representación de la Nava de Arriba a Juan Ortega.

En 1845 aparecen (siempre en el mismo Diccionario) Nava de Arriba y Nava de Abajo, ya no las anteriores. Ambas  en la Provincia de Albacete, Partido Judicial de Chinchilla, y ya en el término jurisdiccional de Pozohondo y se cita que Nava de Arriba está situada en la falda Norte de una sierra, tiene 102 casas habitadas por igual nº de vecinos (70 en Nava de Abajo), labradores y que su terrazgo es muy pingüe (abundante) y feracísimo en años lluviosos.
Los mismos datos aparecen en 1849 y en 1862 se señala que cuenta con  499 habitantes. Partido de Chinchilla (Nava de Abajo 376 habitantes.)

En el año de 1891 aparece como Alcalde de Barrio de Nava de Arriba Jose Antonio Sánchez, estando dividido el Ayuntamiento (Municipio) de Pozohondo en Secciones, correspondiendo la Nava de Arriba a la 3ª Sección y en 1892 a la 2ª Sección.

Como decía, no es fácil encontrar datos sobre la Nava, ya que aunque existen muchos documentos en el Archivo del Ayuntamiento de Pozohondo, estos se refieren casi siempre al conjunto del Municipio o exclusivamente al pueblo de Pozohondo, y es difícil encontrar referencias exclusivas a la Nava.
Aún así, hay algunos datos según los datos publicados en censos nacionales:
En el año 1910 en la Nava de Arriba hay 139 casas y 509 habitantes. En 1920 132 casas y 546 habitantes. En 1940, 686 habitantes; en 1950, 693 habitantes más 28 en viviendas diseminadas, es decir pequeñas aldeas o fincas); en 1960, 704 habitantes.

En cuanto al origen de los nombres, como queda dicho,  en un principio, la aldea se denominó Nava del Pilar, no se sabe muy bien si por ser su Patrona la Virgen del Pilar o por existir en la Plaza Mayor un Pilar que abastecía de agua a los naveros y a sus caballerías (aunque parece más probable esto último). En cuanto al nombre de "Nava", encontramos que es: tierra sin árboles y llana, a veces pantanosa, situada generalmente entre montañas. Por lo tanto tenemos el origen de los dos términos que componen el nombre de nuestra aldea. El Pilar al que hacíamos referencia desapareció a mitad del siglo XX y en su lugar se construyó una gran fuente que tristemente también desapareció cuando se realizó el asfaltado de las calles.

Como digo, según los datos encontrados, La Nava, llego a tener una población de más 700 habitantes en el año 1960. En la actualidad cuenta, tristemente, cuenta con unos 100 habitantes.

Esto es lo que podemos contar hasta ahora sobre la historia de nuestra Nava de Arriba. Seguro que con el tiempo podremos encontrar algunos datos más y algunos hechos curiosos que acontecieron en nuestro pueblo. 

En próximos post contaremos algunas cosas interesantes sobre la Iglesia, el Molino Boriles, y otras cosas que seguro que os pueden interesar.

Raúl Moreno López.